lunes, 9 de abril de 2012

Entrene para Cavalls del Vent (Bisaurin y Puntal Alto do Foratón)



Mientras la mayoría de Zancadas apuntados a Cavalls disfrutan del almuerzo en C´Serruch, uno se lanza a otro tipo de entrene, subir un par de montañitas en el Pirineo.

El día, dicen, va a ser bueno. Pero también dicen que salimos de la crisis y no salimos. Así que sin muchas expectativas me dirijo al refugio de Lizarra para hacer 1.100 metros de desnivel montañero. Lo que me temía, nieve, toda la que no ha caído durante el invierno parece que está cayendo estos días. Salgo del coche y me pongo la mochila cargada con el material de invierno.

Muy buen ritmo hasta el collado de Foratón, eso sí, con nieve hasta las cachas. En el collado me recibe una ventisca que parece atornillada en el macizo del Bisaurin. Pero en fin, como estoy ahí toca al menos intentar subir. Una rampa repleta de nieve y azotada por el viento. Malo, me cruzo con dos vascos que se retiran y cuando dos vascos se retiran de la montaña puedo asegurar que la cosa esta chunga. La ventisca arrecia. Me calzo los crampones y saco el piolet. No se ve absolutamente nada alrededor, solo blanco, toneladas de blanco neblinoso rodeándome. Echo mano al GPS para orientarme entre esos cendales. 2300. 2400. La rampa se hace notar, con un 40% de inclinación que obliga a clavar bien los hierros. 2500 metros, soy demasiado mayor para arriesgar, además, que narices, esta es mi tercera subida al Bisaurin y subir para nada… mejor me retiro, ya que quiero volver muchas más veces a la montaña, y seguir es jugársela.

Desando en recorrido, aunque eso es un decir, ya que me hundo constantemente a veces hasta casi la cintura. La ventisca se ha tragado las huellas de subida. Todo es blanco a mí alrededor, blanco y velado. A estas alturas del día, ¡odio el color blanco!


De nuevo en el collado. Vientos fortísimos que obligan a pisar seguro. Hacia el sur veo que las nubes están siendo barridas, quedando el cielo con agujeros de un azul luminoso. Como hay que entrenar duro, para que luego no me tengan que dar de mamar geles extraños, decido prolongar la jornada intentando subir al Puntal Alto de lo Foratón, que ya conozco de años anteriores y que no tiene ninguna dificultad técnica. Una pronunciada rampa, siguiendo una cornisa de nieve, me deja en lo alto del pico. Mucho viento, con rachas potentísimas, pero hay luz, visibilidad, paisaje que ver y gozar.

Mientras desciendo al refugio pienso que éste ha sido un buen entrene. Reviso el GPS, el desnivel y la distancia, pero lo principal, me he cargado de energía para Cavalls.

4 comentarios:

webmaster dijo...

Me quedo preocupado con lo de "me calzo los crampones y saco el piolet" aunque igual es por mi desconocimento de vocabulario montañero. Enhorabuena por ese entrene, que rueda seguías? A la Pasabán?

Anónimo dijo...

Las fotos son de julio?

Xindi dijo...

Bien, bien, Vicente... eso es un entrenamiento, y no en Ca Serruch, sufriendo con esos bocatas, la cerveza, etc. La nieve era de verdad o eran bolitas de corcho?

SALVA CUÑADO dijo...

Bien Vicente Bien , que envidia cabronazo!!!!!!!!!!